Crónica concierto Supersuckers en Bilbao

Texto y fotos: Lorenzo Pascual (web)

Había ganas de catar uno de los bolos más excitantes que se habían programado para el fin de semana en Bilbao (Kafe Antzokia). No en vano, los Supersuckers se acercaban a la ciudad inmersos en una gira con motivo del 20 aniversario de uno de sus discos seminales, "The Evil Powers of Rock and Roll". Ya era atractivo suficiente pero es que, además, presentaban también nuevo disco, "Suck It", que camina por los mismos derroteros. Olvidada, por ahora, su faceta más country, se centran en sacudir nuestros cuerpos y mentes a un ritmo frenético, a guitarrazo limpio. Sirvió también el bolo para que el que esto escribe catara por primera vez a Negra Calavera, combo local de rockanroll a toda pastilla y que está reclamando su sitio a golpe de electricidad y actitud.

Con un leve retraso tomaron el escenario antzokiano los Negra Calavera que, en formato quinteto, arreciaron en el high energy, se dieron un paseo por el punk y desgranaron en castellano el repertorio de su, por ahora, único disco. Guitarras afiladas, una sección rítmica consistente y un frontman espídico conformaron un bolo que se pasó rápido, gustó a la parroquia y nos puso a tono para lo que vendría después.... Será cuestión de seguirles la pista.

Los Supersuckers llegaron, vieron peeeero... Fueron setenta minutos a piñón y sí, no estuvo mal, pero el deficiente sonido (yo no oía la voz y pensé que era por estar en vanguardia afotando, pero he leído por ahí que no, que era algo general), la falta de una segunda guitarra que aportara cuerpo a los temas y una actitud pelín displicente lastraron el bolo. Arrancaron con temas de su último disco, plenos de energía, y a la quinta empezaron con el disco homenajeado con Eddie Spaghetti comedido en su papel de líder, dejando a Metal Marty Chandler (guitarra) como espoleador de la masa. Los temas se sucedían y mediado el concierto el sonido mejoró notablemente por lo que, a partir de ahí el bolo cursó hacia arriba. "Gone Gamblin'" esparció una semilla que caló profunda ya con "I Can't Hold Myself In Line" (Merle Haggard) y un "Hot Like The Sun" que hizo trizas todo lo que oímos en la primera mitad. De ahí al final un nuevo arreón, versión de Thin Lizzy mediante ("Cowboy Song") y todos para casa después de una noche de rockanroll. Rock on!!!