Fotos y letras: Lorenzo Pascual (web)
Tenía pendiente la crónica del estupendo concierto que dio Paul Weller el pasado jueves en la Sala Santana 27. Y es que tengo las neuronas un poco oxidadas en lo relativo a la escritura. Pero, bueno, ahí van algunas impresiones. Llegué con el concierto a punto de empezar y tuvo que sortear la marea humana que se congregó para ver al Modfather; así que cuando llegué justo me dio tiempo a sacar la cámara y Paul Weller ya estaba encima del escenario. En perfecto estado de forma, Weller triunfó desde el principio, con las primeras filas exaltadas con esa mezcla de soul, pop y rockanroll sincopado que trufa toda su discografía.
Fueron dos horas en las que principió guitarrero con "Cosmic Fringes" para recalar en el soul más estiloso de uno de sus grupos señeros, The Style Council, en "My Ever Changing Moods", al cual volvió en varias ocasiones ("Headstart For Happiness", "It's A Very Deep Sea") hollando la cima en uno de los mejores temas de la velada, "Shout To The Top!", coreado por toda la sala. Sus temas en solitario coparon la mayor parte del concierto sorteando el soul en las baladas, energizadas por los punteos de Steve Cradock (Ocean Colour Scene), y desparramando el rockanroll con las guitarras al frente al final del concierto y en el bis con unas estupendas "Peacock Suit" y "The Changingman". Finiquitó el show con la excitante "That's Entertainment" de los seminales The Jam y ya con la sala en ebullición.
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