Inesperada noche de doblete musical en Bilbao la del pasado jueves 27 de septiembre. The Handsome Family iniciaba su gira de tres fechas que les llevará, además de al Kafe Antzokia, a Orense y Madrid. A ellos se unió Pablo Almaraz y su banda en la Kutxa Beltza del mismo, y estupendo por programación desde hace mucho tiempo, Kafe Antzokia. Y es que no fue hasta que me di cuenta de la coincidencia unos días antes cuando vi la posibilidad de ver también a un armonicista, viejo guerrero en las lides bluseras y que presentaba nuevo disco, The Roadside Kind (alucinen, a 5€ éste y su disco anterior, así que los dos cayeron a la buchaka, y bien que hice, porque suenan estupendamente).

Una media entrada en la Kutxa Beltza (la parte delantera vacía, como si le diera corte a la concurrencia; bueno, eso facilitó el trabajo para las fotos) para ver el show de Pablo Almaraz, que, puntual, desgranó muchos de los temas de su último disco en un formato más eléctrico y contundente, con la guitarra echando humo y la voz y armónica de Pablo sobresaliendo. Fue un concierto estupendo y sincero de blues trufado de rock muy "americana" y ritmanblús espasmódico a veces. Clásico en "Learning To Use It", moderno en "Let Me Go" y rockeando a gusto en "Never Lose Your Drive" con James Room de invitado de lujo (aun sin el slide con el que sí aparece en el disco). Fue un muy buen concierto y, ya lo digo, ¡mejor que el que luego daría The Handsome Family!


El Kafe Antzokia había preparado sillas frente al escenario para ver a The Handsome Family (yo creo que nunca había visto así un concierto en el Antzokia), que se llenaron enseguida, aunque de pie hubo algo menos de gente. Y es que había expectación para ver a una banda que descolló hace años, sobre todo a raiz de la inclusión de su tema "Far From Any Road" en la cabecera de la serie True Detective, pero que para la cita tenía como última referencia su disco Unseen que ya tiene un par de años. Y la cosa ruló a medias. Por allí sobrevoló el country crepuscular de temática bizarra, con asesinatos y serpientes por doquier (mencionaron ambos temas en varias canciones), temas a dos voces que puntuaron alto ("Stalled"), acercamientos al folk más europeo y una revisión de su tema estrella que a mi me dejó frío. Empeñados en hacerse entender (divertidos claro), sus canciones destilan tristeza (o mala leche no lo sé) pero no tuvieron el punch que la ocasión merecía. Sorprendieron esto sí, con algún tema brillante en su sencillez ("Gold") y con las armonías vocales de la pareja en temas que les sientan estupendamente (aun y cuando me pareció ver a Bret Sparks algo mosqueado con su voz en algún tema). No sé, es ese tipo de bandas (me pasa también con los Jayhawks) que yo disfruto más en casa que en directo.

Hacía tiempo que no hacía doblete en Bilbao y la ocasión mereció la pena. Mejor Pablo, algo espesos los Handsome Family aunque dejaron retazos de lo que son, una gran banda. Rock on!


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