JP Harris abandonó el hogar familiar con 14 años, haciendo auto-stop y subiendo de polizón a trenes, viviendo hasta su mayoría de edad apegado a una mochila, durmiendo sobre lonas o en sacos de dormir. De camino hacia el noroeste Americano, trabajó como peón de granja, operador de maquinaria, leñador, lutier y carpintero. Historias reales para un tipo humilde, reflejado en su música de corazones rotos y decisiones complicadas. Alejados de las etiquetas que desvirtúan el término country, J.P. se centra en los viejos sonidos más allá de las modas y las tendencias para rescatar el sonido más auténticamente americano, ese con olor a vaca, a bourbon macerado en barrica y a conciertos en el granero.
17 de febrero, Boite Live, Madrid
18 de febrero, Whisky Bar Los Picos, Liérganes
19 de febrero, La Taberna de Hank, Luanco
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