¿Has tenido alguna vez la sensación de ver a alguien sobre un escenario que está llegando al límite de la entrega? No, no estoy hablando de músicos a los que se les ve que están con ganas o que creen firmemente en su propuesta, es algo más. Es ver a James Brown cayendo en trance sobre sus rodillas y teniendo que ser ayudado a levantarse, es Hendrix prendiendo fuego a su guitarra resignado al ver que ya no queda ni una sola nota que obtener de su cuerpo de madera o, para mi desde el pasado jueves, es ver a Lisa Kekaula de The Bellrays poner en juego su voz y su integridad al dejarse el alma en cada canción como si no hubiera un próximo concierto, como si dentro de este tour europeo, en el cual la fecha de Madrid era tan solo la segunda cita, fuera la última estación de este tren cargado a partes iguales de soul, funk, distorsión y garaje.
Porque lo que pudimos contemplar los afortunados que llenamos hasta los topes la sala El Sol de Madrid no podrá ser olvidado por ninguno de nosotros, probablemente, al menos para el que escribe una de las mayores y mejores exhibiciones musicales que se han podido ver nunca. Una maquinaria perfectamente engrasada para escupir de manera visceral y suicida riffs guitarreros cargados de distorsión, un sonido de bajo percusivo, duro y cargado de groove, un batería, a cargo del nuevo componente de la banda Stefan Litrownik, capaz de ridiculizar a cualquier percusionista heavy y la voz definitiva dentro del soul de este nuevo siglo, Lisa Kekoula que se dejó el alma desde la inicial THE FIRE NEXT TIME, como premonición de que quizás ninguno de los allí presentes volvería a ver el sol después de este huracán, y que sudando hasta la deshidratación (inenarrable la imagen de Lisa en algunos momentos del show arrastrándose a cuatro patas por el escenario buscando una botella de agua con la que poder dar una pequeña tregua a su garganta) y con sus pequeños ojos cerrados hasta que tras el final REVOLUTION GET DOWN se balanceó sobre el borde del escenario para gritar desafiante “Are you ready?” a una audiencia que en estado de shock saltaba y gritaba sin ningún control.
Venían a presentar su nuevo trabajo BLACK LIGHTNING, que interpretaron en su totalidad, editado solamente en vinilo y disponible por el momento en los conciertos de esta gira, y la sensación de escuchar las nuevas composiciones por primera vez en directo, sin ninguna referencia anterior ni ninguna idea de lo que nos encontraríamos redondeaba aún más la magia de esta noche.
Tras dos trabajos mucho más relajados, los anteriores HAVE A LITTLE FAITH y el edulcorado HARD SWEET AND STICKY, producto y consecuencia de la fuga de su guitarrista y compositor principal TONY FATE, ahora en THE HANGMEN, y tras haberles visto en su anterior gira por nuestro país mucho más centrados en su vertiente soul estándar, lejos de la tormenta de sonido STOOGES de su primeras obras, nadie se esperaba el ataque de furia de esta noche. Los actuales BELLRAYS, al menos los que vimos en la Sala El Sol son a su última reencarnación lo que Mr Hyde al Dr Jecklyn, las nuevas composiciones en directo suenan desgarradoras, desde el riff de guitarra de BLACK LIGHTING con un sonido STOOGES y estribillo pegadizo, el desenfreno de HELL ON EARTH, una de las joyas de la noche, que se acelera hasta trasladarte al club más sudoroso de Detroit, la velocidad de LIVING A LIE u ON TOP que parecen salidas de una road movie, el acento high pop energy de POWER TO BURN, o el torbellino a la voz de EVERYBODY GET UP donde Lisa se dejó los últimos pedazos de sus cuerdas vocales en un coro casi gospel,.
Pocos momentos para el relax, tan solo SUN COMES DOWN, la sentida ANYMORE (temazo de sonido clásico Sun Records!!), THE WAY que evoca a la música de las pelis de los 60, o entre las canciones de sus anteriores obras HAVE A LITTLE FAITH ON ME, cantada por toda la sala, ONE BIG PARTY (¿Qué mejor invitación te pueden hacer?) o las seminales SNAKE CITY y VOODO TRAIN interpretadas con una ferocidad impresionante…
Un concierto histórico para una banda de nivel impresionante que acude a su cita con nuestro país de manera periódica sabiendo que en cada una de estas exhibiciones se ganan nuevos adeptos para esta religión soul rock que es su música. Una nueva Aretha Franklin con el acento puesto en los sonidos más duros y con unos feligreses capaces de convertir su palabra en una auténtica Jihad musical. Sus ceremonias son batallas donde Kekaula se mide uno a uno a los presentes en un cuerpo a cuerpo furioso y brutal, claro que ante tal torbellino la única esperanza es salir indemne del envite y esperar una nueva cita.
Por Fran Cea
SET LIST MADRID
1- FIRE NEXT TIME
2- ONE BIG PARTY
3- THAT´S NOT THE WAY IT SHOULD BE
4- MANIAC BLUES
5- CLOSE YOUR EYES
6- SUN COMES DOWN
7- ANYMORE
8- THE WAY
9- POWER TO BURN
10- COMING DOWN
11- LIVING A LIE
12- EVERYBODY GET UP
13- INFECTION
14- HELL ON HEART
15- SISTER DISASTER
16- ON TOP
17- YOU TOOK ME BY SURPRISE
18- BLACK LIGHTING
19- SNAKE CITY
20- VOODOO TRAIN
21- HAVE A LITTLE FAITH IN ME
22- REVOLUTION GET DOWN
Se nota que te han gustado. Tórrida crónica la que te has cascado. En Bilbao, salvo el principio, también fue la ostia. Lo dicho, enhorabuena.
ResponderEliminarLorenzo
Una lastima que los dos conciertos, el de Bilbao y el de Madrid, fuesen tan diferentes...me alegro de haber colgado las dos crónicas. Para gustos colores...
ResponderEliminarY eso que no tocaron el 'psychotic hate man' ni el 'pinball city', que casualmente son las que más le molan a este servidor. Por lo demás, la ostia en zapatillas el concierto.
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