
Así pudimos asistir al retorno de THE ZEROS, la confirmación de THE BOTTLE ROCKETS (para el que escribe es sin duda el concierto del año), disfrutar la honradez de RHINO BUCKET, contemplar entre asombrados y confundidos la gira de MARC FORD & THE STEEPWATER BAND, la furia de THE ANSWER, la clase de LOVE ME NOTS o, como era ahora el caso la primera visita a Europa de THE DIRTY SWEET para presentar su nueva obra AMERICAN SPIRITUAL.

Cuando publicaron su álbum de debut OF MONARCHS AND BEGGARS lo disfruté como el primer disco de una banda que apuntaba una gran frescura y un bagaje que les emparentaba con los trabajos iniciales de unos Black Crowes o Screamin´ Cheetah Wheelies con una base más blues y country, un trabajo de combustión espontánea (temas como SIXTEEN se clavan en tu cerebro a la primera escucha) y fácil asimilación que sonó incesantemente durante unos meses en mi reproductor y que poco a poco fue dejando paso a otros discos.

Con las noticias acerca de su nuevo trabajo, que aunque publicado este año ya estaba disponible en 2009 y que la banda ofrece de manera gratuita para su escucha en www.dirtysweetmusic.com/press.html, mi interés volvió a resurgir ya que desde la primera escucha se apreciaba un giro musical arriesgado y cautivador, dirigiéndose musicalmente hacia terrenos donde las raíces musicales de su país tomaban el protagonismo, por medio de canciones de aires country, coros sesenteros y una perfecta combinación entre lo acústico y lo psicodélicamente eléctrico,. Un trabajo que, al contrario que el que le precede, se va disfrutando y descubriendo en cada escucha y que aporta matices nuevos y refrescantes.
Esta gira era el momento para comprobar la evolución en directo de los de San Diego y ver si esa combinación se consolidaba sobre las tablas para no perder cohesión en su discurso.

La banda funciona como una máquina engrasada con Chis Vanacore, con su look a lo Bonham, golpeando con groove un set de batería sencillo, Shaun Cornell con un bajo Fender antiguo y un aspecto físico cercano a un Phill Lynott blanco, Nathan Beale a la guitarra de manera participativa y echando una mano en los coros y sobre todo el derroche vocal de Ryan Koontz con unos tonos altos que acentuaban el aire a los años 60´s de su música en la actualidad (hubo momentos como en MARIONETTE en los que la imagen de Morrison me rondó por la cabeza) y que venció una inicial timidez con sus bailes, saltos y entrega por el escenario.

Los mejores momentos llegaron en la fase central de su show, en el que se centraron en AMERICAN SPIRITUAL y desde el toque country de la impresionante YOU´VE BEEN WARNED donde la guitarra acústica se sustituyó por eléctrica con el aire del Mothers Little Helpper de los Stones en su melodía, la citada psicodelia de MARIONETTE o el ritmo cadencioso de PLEASE BEWARE pusieron el contrapunto perfecto a la dicotomía que la formación sufre cuando ataca velozmente composiciones como CRIMSON CAVALRY o GET UP, GET OUT, los lazos de unión con su debut, o las más clásicas SIXTEEN (vaya trallazo) o DELILAH con su base blues y su tono heredero del gran Mike Farris.
Algo más de una hora de actuación hasta que se retiraron a camerinos para atacar por dos veces con una serie de bises en los que se dejaron llevar por improvisados desarrollos instrumentales, dejaron espacio de lucimiento a sus guitarras y nos obsequiaron con una grandiosa cover de BOB SEGER para poner punto y final a la que fue una de las noches más especiales del año.

Basándose en su tenaz entusiasmo por el pasado musical y sus ganas de disfrutar tocando, probablemente ellos eran los más felices de todos los presentes en la sala, DIRTY SWEET saldaron con sobresaliente su primera gira por nuestro pais. Si el mercado les deja y la carretera no les pasa factura tenemos a una banda grandiosa capaz de facturar albums que lleguen a la categoría de clásicos. Ellos han decidido decantarse por una búsqueda de las raíces musicales que hace que su “caramelo” no este “sucio” sin envenenado, al menos de buena música para todos los que gustamos de sabores auténticos.
by beerbeer
Muy buena cronica.
ResponderEliminarMe encanto el concierto de esta gente en Valencia al cual íbamos algo escepticismos.
Me fascino sobretodo su batería y no por darle un aire a Bonzo sino por su manera de tocar, era el que llevaba la manija del grupo, el que les hacia sonar tan contundentes, mucho mas que en el disco.
Gracias Beerbeer por la crónica de un grupo que me gusta mucho, la lastima es que no pude ir a verlos. Pero seguro que hay más oportunidades porque son muy recomendables. Un saludo.
ResponderEliminarRey Lagarto me apunto el batería. Hoy en día es complicado que destaque el batera en cualquier grupo y si tiene un aire a bonham habrá que seguirle